sábado


A sabiendas de la incontinuidad que el tiempo delata en la perspectiva de vida actual, me involucro en relaciones que carecen de finalidad. Veamos, todos los días intentamos encontrar un poquito de singularidad que nos aleje de la rutina y de los besos, de los besos y caricias que se entregan sin deseo o de los que se desean y no se reciben.
Vamos, nos delata la ineptitud. Nos delatan las ganas.

Una búsqueda infructífera.